En realidad fue en dos días distintos en los que borré sistemáticamente todo rastro mío de internet. El primero fue entre 2012- 2013. Ya había leído acerca de la importancia de tener tu presencia online y de cómo cada vez más surgirían oportunidades de trabajo a través de este canal. Pero, yo no quería ser visible. Yo quería permanecer oculta. Me decía mi misma que era importante mas no necesario.
Te soy sincera, tenía pavor a hacer mi imágen pública. Internamente me decía: ¿quién era yo?, ¿qué había logrado?…
Ahora entiendo que lo que se escondía detrás de ese pavor era el miedo a la comparación y a la crítica.
En esas fechas, un día busqué mi nombre en google. Aparecieron muchos resultados, me quedé sorprendida. La gran mayoría relacionados a las adopciones de gatos y perros que yo publicaba a través de facebook en grupos de animalistas.
(Te cuento que he llegado a dar en adopción cerca de 60 gatitos abandonados en las calles. Los bañaba, despulgaba, desparasitaba y daba temporal en mi casa. Les tomaba unas fotos hermosas y les buscaba hogares. Aún lo sigo hacieno, pero en menor en frecuencia.)
El resto eran algunos comentarios que dejé por internet (era fan de la animación japonesa y leía algunos blogs). En fin, me dio «verguenza que «ese lado mío » aparecíera. Me dije a mi misma: ¿qué dirán los de recursos humanos si ven esto, o mis futuros jefes? Quizás dirían que soy una «loca» de los gatos o quizás se preguntaban ¿a «eso» dedica su tiempo libre? Pensé que me ningunearían.
Recuerdo ir a cada búsqueda, entrar a las páginas animalistas y borrar todas mis publicaciones. Incluso restringí el acceso a mis carpetas de fotos de gatitos en adopción. Lo mismo con mis comentarios en la web. Eliminé todo.
Pero, no quedó solo allí….también desactivé la opción de que google muestre mi facebook si alguien digitaba mi nombre y descativé la opción de «seguirme» en facebook. No quería que nadie me encuentre. ¿Quién era yo?No había logrado lo que se esperaba de mí. La universidad me estaba costando mucho, era un fracaso…
La segunda vez fue entre 2014-2015. Me volví a buscar y arrasé con todo. No quería que me encuentren. Esta vez fue más sencillo. Ya para estas fechas Linkedin era popular en Perú. A mi me daba igual, ni me atrevía a hacerme una cuenta. Respecto a mis publicaciones en facebook, ni me atrevía a tener alguna pública. Todas eran privadas (le tenía miedo a exponer lo que pienso, a debatir).
Mientras escribo esto, me doy cuenta de que baja era mi autoestima en aquella epoca. ¿Desde cuándo pensaría que era una fracasada?¿Cuántos años han pasado para que le de importancia a mi estima personal, ¿no?. Por favor no dejes que eso te pase a ti también.
Ahora me digo a mi mísma que no tengo por qué avergonzarme de quién era o quien soy. El ser alguien con una gran sensibilidad hacia los animales, es algo hermoso (Creo que todos tenemos en mayor o menor medida una sensibilidad hacia algo). El que haya dedicado mi tiempo a encontrar hogar a tantos animales es algo que me enorgullece. He contribuído a mejorar la vida de muchos de esos animalitos abandonados y de sus dueños. Además, hacer todo eso, me enseño muchas otras habilidades.
Y son esas habilidades las que debemos buscar resaltarlas a la hora que estamos en una entrevista de trabajo. Darle la vuelta y decirlo cómo nuestros hobbies pueden ayudar dentro de la empresa. No lo veas como algo malo, dale la vuelta y conviértelo en una fortaleza, en una ventaja que te diferencia del resto. Por ejemplo una de las cosas que aprendí(y sigo aprendiendo) : fue el trabajo en equipo, la importancia del compromiso y la tolerancia.
Por último, si a tus futuros jefes, contactos, o proveedores no les gustan ese lado tuyo o no lo entienden. Pero, hacer el contacto implica una oportunidad de crecimiento para ti, pregúntate qué puedo aprender de ellos, dale la vuelta 😀. Si por el contrario, no hay oportunidad de crecimiento, déjalo y búscate otras oprtunidades. ¡No te conformes!¡Tenemos mucho que dar, apuntémos alto!
¿Y tú alguna vez borraste algo que ahora consideras que no tenía nada de malo e incluso piensas «vaya tontería que hice, si no había nada de malo»?